La UNESCO renueva la Cátedra de Ingeniería Ambiental promovida por la Universidad de Cantabria y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso
El objetivo de la Cátedra es la promoción de un sistema integrado de actividades en el campo de los residuos sólidos y la calidad del agua
La UNESCO ha renovado recientemente y hasta 2020, la Cátedra en Ingeniería Ambiental, que se estableció en mayo de 1993 promovida por la Universidad de Cantabria y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso en el marco del Grupo Santander, siendo la única a nivel mundial en su ámbito.
Los académicos a cargo de la Cátedra son Iñaki Tejero, catedrático de Ingeniería Ambiental en la Universidad de Cantabria (UC) y Director del Grupo de Investigación en Ingeniería Ambiental, y Marcel Szantó, director del Grupo de Residuos Sólidos de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV).
El principal objetivo de la Cátedra es la promoción de un sistema integrado de actividades de investigación, formación, información y documentación en el campo de los residuos sólidos y la calidad del agua.
Tras evaluar las acciones realizadas por la Cátedra desde 2010, la UNESCO ha procedido a renovar el acuerdo establecido con las universidades promotoras. Entre otras actividades, en los últimos años, la cátedra ha colaborado en la implantación de estudios de Magister en Ingeniería Ambiental y el montaje de un laboratorio de Residuos Sólidos en la PUCV, ha fomentado la realización de investigación conjunta y el intercambio de estudiantes y profesores, ha apoyado la creación de la Red iberoamericana en gestión y aprovechamiento de residuos (REDISA-REDIGAR) y ha extendido y difundido su trabajo, ayuda y asesoramiento en la práctica totalidad de los países de América Latina y el Caribe.
Las Cátedras UNESCO llevan a cabo actividades de formación, investigación y de intercambio de información vinculadas con los programas pertenecientes a las principales áreas de la UNESCO: educación, ciencias naturales, ciencias humanas y sociales, cultura y comunicación e información. Así, proporcionan medios innovadores para la cooperación universitaria a nivel internacional, especialmente en los niveles Norte-Sur y Norte-Sur-Sur y para el desarrollo de capacidades. Actúan como grupos de reflexión y como puentes entre la investigación la decisión política, el mundo académico y la sociedad civil, las comunidades locales y el sector productivo.
Foto: Iñaki Tejero
