SS.MM. los Reyes de España presiden en Salamanca el solemne acto de apertura del curso 2017-2018 de las universidades españolas
El rector de la Universidad de Cantabria, Ángel Pazos, participó en el acto celebrado el pasado jueves
Sus Majestades los
Reyes de España presidieron el pasado jueves en el Paraninfo de la
Universidad de Salamanca el solemne acto de apertura del curso 2017-2018 de las
universidades españolas, con motivo de la celebración del VIII Centenario, en la que también participó el rector de la Universidad de Cantabria, Ángel Pazos.
Durante su
intervención, el rector de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández
Ruipérez, animó a la sociedad española y a sus responsables políticos a
aprovechar esta conmemoración, declarada por el Gobierno como Acontecimiento de
Estado de Excepcional Interés Público, para abordar los grandes cambios que
necesita el modelo de universidad en España y así afrontar con éxito los retos
a los que se enfrenta.
El rector defendió la
calidad de las universidades públicas españolas frente a las críticas basadas
únicamente en la posición que ocupan en los ranking internacionales, que no
tienen en cuenta ni su baja financiación, “muy inferior a cualquiera de los
países de nuestro entorno”, ni sus rígidas normas administrativas, “que les
impiden ser ágiles y competitivas”.
“Es cierto que en
2016 España solo tenía una universidad entre las primeras 200 del mundo, pero
tiene 20 universidades entre las primeras 500, solo superada por Estados
Unidos, Reino Unido, Alemania, Canadá y Australia. Y España tiene 44 universidades
entre las 1000 primeras del mundo, solo superada por Estados Unidos, Reino
Unido y Alemania. Las probabilidades que tiene un joven español de estudiar en
una universidad entre las 1000 primeras es del 17,5%, superior al 13,4% de un
alemán o al 8,4% de un estadounidense, y solo inferior al 27,7% de un
británico. Además, casi todas esas 44 universidades son públicas, por lo que
casi el 80% de las universidades públicas españolas están entre las 1000
primeras del mundo”, subrayó.
Sin embargo, y a pesar
de estos buenos datos, Hernández Ruipérez consideró que el modelo universitario
español “está agotado y necesita una profunda reforma”, al tiempo que se mostró
partidario de afrontar importantes modificaciones legislativas, “que respondan
a una estrategia clara de progreso para competir con otros sistemas y estar en
las mejores condiciones para servir a la sociedad”.
Cinco ejes de la
reforma
Una reforma que, a su
juicio, pasa por cinco ejes: mayor autonomía, tanto en sus objetivos y
decisiones como en los mecanismos de gestión; cambio de los sistemas de
gobernanza; el diseño de un sistema de financiación estable y suficiente basado
en objetivos; el establecimiento de figuras de profesorado más flexibles, que
permitan atraer y retener talento mediante condiciones salariales y de trabajo
más competitivas; y, finalmente, el diseño de un sistema de titulaciones
universitarias de gestión ágil que tenga en cuenta las necesidades y demandas
de la sociedad.
“Debemos aprovechar
la celebración del VIII Centenario de la Universidad de Salamanca y del sistema
universitario español para que la sociedad española sea consciente de que su
futuro depende decisivamente de disponer de una universidad moderna, ágil,
robusta y abierta al mundo, que exija a nuestros gobernantes las medidas de
todo tipo que lo hagan posible y a los universitarios el compromiso y la altura
de miras para desarrollarlas”, precisó ante la presencia del ministro de
Educación y 35 rectores de toda España.
En la ceremonia de
inauguración del curso académico 2017-2018, no podían faltar por parte del
rector las referencias a la conmemoración de los 800 años de historia de la
Universidad de Salamanca, lo que la convierte en la más longeva de las
universidades españolas y del sistema universitario español.
Terrorismo y
legalidad en Cataluña
En su intervención,
en un abarrotado Paraninfo, Hernández Ruipérez no pasó de largo sobre los temas
de actualidad. Tras reprobar los “horribles atentados terroristas ocurridos el
pasado mes de agosto en Barcelona y Cambrils, que acabaron con la vida de 16
personas”, el rector expresó su condena ante los actos de quienes quieren
separar a Cataluña del resto de España “mediante una estrategia decidida de
incumplimiento de las leyes y desobediencia a las resoluciones judiciales”.
“No tengo la
representación de las universidades ni de sus rectores, pero soy el único de
ellos que tiene voz en este acto. Y debo por ello expresar mi condena a esos
comportamientos y el apoyo al Gobierno para que mantenga en todo momento la legalidad.
Callar en este momento, inaugurar el curso de las universidades españolas como
si España no tuviera la crisis institucional más importante desde el 23 de
febrero de 1981, sería mantener un silencio indigno”, apostilló el rector,
quien consideró necesaria la aportación de los universitarios, como
intelectuales, “de participar en la reflexión sobre un problema político de
extraordinaria magnitud, que tiene dividida a la sociedad catalana, y de
contribuir a la búsqueda de soluciones y al restablecimiento de un clima de
colaboración y entendimiento, como deberíamos haber hecho desde la universidad
española y no hemos hecho en la medida necesaria”.
También intervinieron
en la ceremonia el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de
Vigo; y el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera.
Cerró la sesión S.M. el Rey, quien declaró inaugurado el curso universitario
2017/2018.
Tras el acto de
inauguración, los Reyes don Felipe y doña Letizia descubrieron un vítor
conmemorativo en el Patio de Escuelas Menores.