El espacio de la esculela refleja la identidad de la misma y es uno de los elementos determinantes de las relaciones que se establecen en ella, un escenario de acción, interacción y comunicación entre los niños y niñas, las educadoras y las familias.

En su diseño hemos partido de la idea de que una estética y cuidada organización y disposición del mobiliario y los materiales, ayuda al desarrollo global de las criaturas, propiciando diferentes situaciones de aprendizaje, múltiples relaciones y a la autonomía y de otros.

Hemos acondicionado los espacios de manera polivalente, para que puedan ser utilizados para distintas funciones según los momentos del día, cuidando que sean sanos y seguros, evitando riesgos innecesarios y favoreciendo el uso y disfrute de manera independiente y autónoma.

Espacios amplios, sin obstáculos que hacen posible que los niños y niñas puedan acceder a todas las dependencias y a todas las personas, que favorecen diferentes situaciones de comunicación; espacios que ofrecen un ambiente acogedor, cálido, estimulante y ordenado, que implican desafíos para el aprendizaje y permite a los niños y niñas ir construyendo una imagen ordenada del mundo que les rodea.

Para todo ello contamos con un hall, el jardín y tres aulas, que cumplen la función esencial de ser los espacios de referencia para los niños y niñas, ofreciendo distintas posibilidades de agrupamientos y una amplia gama de posibilidades de acción.