“El mayor porcentaje de despilfarro agroalimentario se produce en los hogares y la restauración”, dice Odriozola
La profesora de la UC ha participado en el Curso de Verano UC sobre ‘Economía circular’ que se está celebrando en Suances
Según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, alimentación y medio ambiente, el mayor despilfarro agroalimentario se produce en los hogares y en la restauración, un 56% del total. Así se ha pronunciado María Dolores Odriozola, profesora ayudante doctora de Organización de Empresas de la Universidad de Cantabria (UC) e integrante del Grupo de Investigación de Gestión Económica para el Desarrollo Sostenible del Sector Primario, que el lunes intervino junto a su compañera Elisa Baraibar en 'Economía circular: Eficiencia en el uso de recursos', el Curso de Verano UC que se imparte estos días en El Torco de Suances.
Los desechos producidos en los hogares son causados por malos hábitos, falta de planificación, y dificultad en la interpretación del etiquetado, subrayó Odriozola, que también señaló al ámbito de la restauración, lo que se conoce como Canal HO.RE.CA., donde se desperdician muchos alimentos no consumidos o productos mal conservados que alcanzan el 14% del total.
Respecto al resto de los eslabones de la cadena de valor agroalimentaria, las principales causas de despilfarro alimentario derivan de los estándares de calidad (en cuanto a color, tamaño, forma y maduración) que afectan tanto a productores como a distribuidores.
Para intentar combatirlo, Odriozola, Baraibar y el resto de integrantes del Grupo de Investigación de 'Gestión Económica para el Desarrollo Sostenible del Sector Primario' están trabajando, junto a la Dirección General de Política Social del Gobierno de Cantabria, en un proyecto contra el despilfarro alimentario. En este sentido, han clasificado alrededor de 200 iniciativas y han mantenido reuniones con diferentes representantes de la cadena de valor: productores, distribuidores, y asociaciones de hosteleros y consumidores.
En este sentido, algunas conclusiones obtenidas a raíz de las reuniones anteriores ratifican que "los productores Cántabros con los que han contactado no suelen tener excedentes, bien porque tienen algún sistema de planificación, porque tienen asegurada la venta o porque tienen mayor demanda que oferta al ser producciones pequeñas, como ocurre con algunos alimentos con certificados de calidad", ejemplificó la experta.
Además, subrayó que generalmente el poco excedente que tienen "se dona a instituciones que van a recoger el producto; se tira al contenedor de punto limpio, se hace compostaje; o en el caso de los desechos cárnicos se valoriza".
En cuanto a la industria, "la reducción del despilfarro viene acompañada de inversiones en I+D, lo cual advierte de la necesidad de valorar la viabilidad económica de las medidas y el horizonte temporal", afirmó Odriozola.
Sin embargo, la profesora de la UC, hizo hincapié en que es en el eslabón de la distribución donde más iniciativas se están llevando a cabo, "aunque el éxito de muchas de ellas está supeditado a la actuación del consumidor", aclaró.
A pesar de la preocupación social respecto a la gestión de residuos, el principal escollo a solventar es la "concienciación real", concluyó Odriozola.
