Pablo Arias Cabal renueva como presidente de la Comisión de Mesolítico Europeo de la UISPP
La Unión Internacional de Ciencias Prehistóricas y Protohistóricas tomó esta decisión en el marco de su Congreso Mundial celebrado en París
El Comité Ejecutivo de la Unión Internacional de Ciencias Prehistóricas y Protohistóricas (UISPP) ha renovado el mandato como presidente de la Comisión de Mesolítico Europeo (Holocene hunter-gatherers in the Cirummediterranean area and Europe) al catedrático de la Universidad de Cantabria (UC) Pablo Arias.
La decisión se tomó el pasado 6 de junio en la reunión anual de dicho organismo que tuvo lugar en la Facultad de Derecho de la Universidad de París (Sorbona), en el marco del Congreso Mundial de esa organización. En ella se aprobó una reorganización de las Comisiones de la UISPP, y una nueva composición del Comité Ejecutivo, del que formará parte durante los próximos tres años el profesor Arias.
La UISPP es la más prestigiosa organización científica internacional en el ámbito de la Prehistoria. Patrocinada por la UNESCO, organiza periódicamente los Congresos Mundiales de la especialidad, y desarrolla una actividad permanente a través de comisiones que agrupan a los principales especialistas en determinados períodos o aspectos de la disciplina. La comisión de Mesolítico, que preside el catedrático de la UC, incluye un selecto grupo de investigadores procedentes de 14 países y 4 continentes.
Pablo Arias Cabal
Pablo Arias Cabal es catedrático de Prehistoria de la Universidad de Cantabria, en la que ha ocupado, además, diversos cargos académicos, entre los que destacan los de director del Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria (2005-2009), vocal del Consejo Social (1986-1990) y vicedecano de la Facultad de Filosofía y Letras (1993-1996). Ha sido también profesor invitado en la Universidad de Oxford, fellow del Wolfson College de esa misma Universidad y profesor invitado de la Universidad Nacional del Comahue (Argentina).
Su actividad investigadora se ha centrado en el estudio de las sociedades de cazadores-recolectores avanzados y su transición a las primeras sociedades campesinas, en particular en la fachada atlántica europea y en Sudamérica. Ha dirigido numerosos programas de investigación arqueológica, entre las que destacan las excavaciones de los sitios mesolíticos de Los Canes, Arangas y El Alloru, en Asturias, de los concheros de Poças de São Bento, Cabeço das Amoreiras, Arapouco, Cabeço do Pez y Barrosinha, en Portugal, del cementerio mesolítico de Hoëdic, en Francia, y de los abrigo de Arroyo Corral I y Arroyo Corral II, en la Patagonia argentina. No obstante, su aportación más relevante ha sido la dirección, desde su inicio en 1996, del gran proyecto de investigación interdisciplinar que se lleva a cabo en la Zona Arqueológica de La Garma (Cantabria). En la actualidad, dirige también un proyecto acerca del desarrollo del pensamiento simbólico en las sociedades del Paleolítico y el Mesolítico, en el que participan 70 científicos de diversas instituciones españolas y extranjeras.
Resultado de esos trabajos ha sido la publicación de más de dos centenares de artículos en revistas especializadas y libros colectivos, tanto en España como en diversos países extranjeros (Francia, Alemania, Reino Unido, Bélgica, Italia, Portugal, Irlanda, Suecia, Estados Unidos), así como de las monografías 'De cazadores a campesinos: La transición al Neolítico en la región cantábrica' (Santander, 1991), 'Marisqueros y agricultores: Los orígenes del Neolítico en la fachada atlántica europea' (Santander, 1997), 'La Garma, un descenso al pasado' (Santander, 1999 y 2001), 'El Neolítico' (Madrid, 2000) y 'La Materia del Lenguaje Prehistórico' (Santander 2004 y 2005). Ha participado también en numerosos congresos internacionales como ponente o comunicante, y, desde su constitución en 1994, es miembro del Comité Científico de los Congresos del Neolítico en la Península Ibérica, el tercero de los cuales organizó en Santander en 2003.
Como director del proyecto de La Garma, recibió en 1996 el Premio "Sobresaliente del año", y en 1998 el premio "Cantabria Nuestra", otorgado por la asociación de ese nombre en reconocimiento por la labor en la investigación y difusión del Patrimonio.
