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​La vicerrectora de Internacionalización y Cooperación de la Universidad de Cantabria (UC), Teresa Susinos Rada, y el consejero de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Cantabria, Francisco Fernández Mañanes, han presentado esta mañana en la Facultad de Educación el informe 'Clima, conflicto y gestión de la convivencia en centros educativos no universitarios', encargado por el Observatorio de la Convivencia Escolar en el curso 2016-2017 y coordinado por los profesores Susana Lázaro-Visa y Andrés Fernández-Fuertes del grupo de investigación en Desarrollo Socio-Emocional, Bienestar y Educación (IDSEBE) de la UC. 

Acompañados por el decano de la Facultad de Educación, José Manuel Osoro Sierra, y por la directora general de Innovación y Centros Educativos, María Isabel Fernández Gutiérrez, en el acto se han abordado las principales conclusiones del citado informe así como las propuestas de actuación. El estudio arroja que la percepción del clima escolar por parte del profesorado, alumnado y familias en Cantabria es, en líneas generales, muy positiva. 

Teresa Susinos ha agradecido la confianza de la Consejería de Educación por el encargo de la elaboración de este informe, así como a los centros y al equipo investigador, abogando por la "estrecha colaboración entre todos los agentes implicados" que redunde en "resultados útiles para mejorar la práctica en los distintos centros de Cantabria", ha afirmado.

Por su parte, José Manuel Osoro ha destacado el gran trabajo de investigación llevado a cabo por un equipo multidisciplinar de la Facultad de Educación y que ha calificado de "primer nivel".

En cuanto al trabajo de campo, se realizó durante los meses de abril y mayo de 2017.  El muestreo se hizo entre el alumnado (un total de 1.432 encuestas), familias (523) y profesorado (327). Para ello, se emplearon cuestionarios diferenciados para cada colectivo, recogiendo información sobre el clima escolar y la percepción del funcionamiento del centro por parte del profesorado, añadiendo, en el caso del alumnado, su visión del aula.

En primer lugar, el titular de Educación ha querido agradecer y reconocer el trabajo realizado por el equipo de investigación IDSEBE, y en especial a los coordinadores del informe, por su "generosidad" en la colaboración y presentación detallada de dicho documento.

El consejero ha reconocido que "es evidente que hay algunos matices, que destaca el propio estudio, por una cierta normalización de las agresiones, fundamentalmente verbales", algo que preocupa y donde se va a poner el foco de atención, ya que "no podemos dar por normal una situación de agresión aunque sea verbal o de baja intensidad", ha enfatizado.

En segundo lugar, el estudio revela que es fundamental para los procesos de enseñanza-aprendizaje gozar de un buen clima escolar y de una buena convivencia, ya que "la calidad de esa convivencia y la percepción que tienen los alumnos de disfrutar de unas buenas relaciones son claves para la mejora de su rendimiento", y por tanto, "es una prioridad establecer políticas que tiendan a la  prevención del conflicto escolar", ha añadido Fernández Mañanes.

Propuestas de mejora

Asimismo, el estudio plantea una serie de propuestas de mejora de carácter preventivo a través de la mejor formación del profesorado que reclama en este estudio un mayor esfuerzo formativo para poder atajar estos conflictos en su estado previo. Entre ellas, cabe destacar el fomento del rechazo ante todo comportamiento agresivo; potenciar los valores humanos y las habilidades de tipo social y personal; reconocer, visibilizar y promover el respeto por la diversidad; mejorar los canales de comunicación entre el alumnado, profesorado y las familias; así como una participación más efectiva de todos los colectivos en la toma de decisiones de los  centros, fomentando el empoderamiento del alumnado

Pie de foto: de izquierda a derecha, Osoro, Susinos, Fernández Mañanes y Fernández Gutiérrez.