Noticias Universidad de Cantabria

El hispanista Paul Preston y el ingeniero de Telecomunicación José Antonio Martín Pereda han ingresado esta tarde en el Claustro de Doctores Honoris Causa de la Universidad de Cantabria (UC), en una ceremonia que ha tenido lugar en el Paraninfo universitario, presidida por el rector, Ángel Pazos.

El prestigioso historiador británico relató en su discurso de aceptación su recorrido biográfico desde un barrio obrero de Liverpool a su ingreso con una beca en la elitista Universidad de Oxford para estudiar Historia, hasta llegar a uno de sus últimos proyectos: escribir una obra sobre nuestro país desde la Primera República hasta la actualidad bajo la perspectiva de una temática triple, "la corrupción, la incompetencia política y las fracturas y divisiones sociales que se derivan de los dos primeros temas". 

"Ha sido casi como escribir la historia del Brexit y, como el Brexit, es una fuente de perplejidad y desasosiego". "Todavía estoy lejos de llegar a conclusiones finales sobre el misterio central, o sea, por qué un país, sea España o Gran Bretaña, adquiere una clase política incompetente e indiferente al interés nacional", aseguró.

Experto en la figura de Franco, explicó que cuando estudió su figura, tras las iniciales reticencias, descubrió "personalmente hablando, un enigma, con aspectos bastante cómicos: un hombre que pagaba a un alquimista y a un tramoyista que le ofreció confeccionar un polvo que disuelto en agua creaba el petróleo, que pensaba que Juan XXIII era masón o que Pablo VI era bolchevique, o que el mundo estaba regido por un superestado masónico que no se sabía si estaba en la luna o debajo del Atlántico y al cual obedecían los gobiernos de Washington y Londres".

Además de su vinculación personal y profesional con España, Preston aludió en varias ocasiones a su especial relación con la capital cántabra y con la UC: "España, Cantabria y su universidad, y la ciudad de Santander tienen mucha importancia en mi vida.  Sin embargo, aunque comencé mi relación con España a finales de los años sesenta, no conocí Santander hasta doce años después.  Estuve aquí en 1981, cuando todavía se llamaba Universidad de Santander", comenzando una serie de conexiones y redes con profesores e investigadores.

Una de sus visitas a Cantabria fue para escribir El holocausto español, donde trató los "múltiples temas que afectaron al Santander de la época: el anticlericalismo y la violencia en la primavera de 1936 y durante la guerra civil, el fracaso del golpe militar en 1936 y la represión en la ciudad y la provincia a manos de ambos bandos".

Precisamente, la catedrática María Jesús González Hernández, del Departamento de Historia Moderna, fue la madrina y encargada de leer la laudatio sobre Paul Preston, de quien destacó "su compromiso cívico y democrático", lo que le "ha involucrado en las reivindicaciones de la reparación política e histórica a la memoria y dignidad de las víctimas de la contienda civil, así como de la apertura o recuperación de archivos. Esta actitud, tan valiosa en tiempos complejos, sumada a su gran capacidad de comunicación y divulgación, influye en que no sólo sea leído y respetado entre especialistas, sino en que haya trascendido los muros académicos y se haya ganado la admiración y el aprecio de un público muy amplio".

"España, dice Preston, se ha convertido en su viaje favorito, en su destino más frecuentado intelectual, sentimental y físicamente durante más de 50 años. En esa larga travesía ha dejado impresa en nuestra historiografía una huella indeleble, como lo hicieron Raymond Carr y Hugh Thomas, los otros dos grandes hispanistas contemporaneístas que le precedieron, sus maestros y luego sus colegas", añadió González Hernández.

Martín Pereda: la Fotónica ha sabido dar soluciones a problemas en diferentes campos

Por su parte, el físico e ingeniero José Antonio Martín Pereda dedicó buena parte de su discurso a reivindicar la "consistencia" de la Fotónica, una ciencia que "ha logrado que su campo de actividad sean todas las ramas del conocimiento", al tiempo que "ha sabido dar soluciones a muchos de los problemas encontrados en diferentes campos", un fenómeno que, "en lugar de detenerse, se acelera cada vez más".

En este sentido y ante la actividad transnacional y multitemática en la investigación, "es necesario que los grupos que trabajan en ella no vean depender sus realizaciones de los vaivenes políticos o de las cegueras de los responsables de administraciones, empresas y organismos públicos o privados. La Fotónica, al igual que cualquier otra rama de la Ciencia o la Tecnología, necesita continuidad. Continuidad para seguir en sus ideas y continuidad para alcanzar sus objetivos".

Martín Pereda pidió un análisis de "hacia dónde se quiere ir y las fuerzas de que se dispone. Solo emular a lo que se hace en el exterior puede no ser el camino más acertado. Toda investigación ha de atender al entorno en el que se lleva a cabo. Las condiciones de contorno son las que siempre determinan la solución de un problema".

"La sociedad como un todo, desde los políticos hasta la última pieza del engranaje social, deberían de estar educados en el sentimiento y en la creencia de que la tecnología y la ciencia son algo suyo, no algo que solo sirve de decorado en algunas ocasiones. Que de ambas depende su futuro", concluyó.

El catedrático José Miguel López Higuera, del Departamento de Tecnología Electrónica e Ingeniería de Sistemas y Automática, ejerció de Padrino y, por tanto, realizó la laudatio del profesor Martín Pereda, introductor de la Fotónica en España "y creador de una amplia escuela de discípulos repartidos por la geografía española y por diversas partes del mundo".

Además de sus numerosos reconocimientos, cargos y logros, como ser "el arquitecto del primer Plan del I+D de la democracia española", López Higuera destacó su faceta como un "excelente divulgador científico", así como la continuada relación del Doctor Honoris Causa con la UC, bien "en cursos de verano, escribiendo capítulos de libros, en conferencias" o "mediante su impulso, apoyo y consejo, de iniciativas docentes e investigadoras".

Espíritu crítico

El rector de la UC, Ángel Pazos, tras felicitar y elogiar a los dos académicos, expresó la idoneidad de que hoy se reconozca por una parte, a un historiador de prestigio internacional, una persona que ha dedicado su vida a las humanidades, y, por la otra, a un gran experto en una disciplina como la Fotónica.

Sobre este punto, Pazos añadió que "la Universidad tiene que ser capaz de combinar perfectamente las dos visiones. Tiene que mantener el espíritu crítico, la reflexión, el análisis y, a la vez, tiene que estar muy presente escuchando lo que las nuevas tecnologías, los nuevos mercados, las nuevas demandas industriales le digan".

El rector de la UC hizo también mención a una planificación de apoyo a la I+D en España, pues "como se ha dicho muchas veces, los países ricos no investigan porque son ricos, sino que son ricos porque investigan".

La ceremonia académica, que fue amenizada con temas de la Camerata Coral UC y pudo seguirse vía streaming, culminó con la entrega de los diplomas de los Premios Extraordinarios de Doctorado en el Área de Ciencias de la Salud, que recibieron Lorena García, Arantza Onaindia, Javier Rueda, Sandra Sagredo, Patricia Saiz y Javier Vázquez.

Entre las autoridades asistentes al acto se encontraba el delegado del Gobierno en Cantabria, Eduardo Echevarría; la vicepresidenta del Gobierno regional y consejera de Universidades e Investigación, Medio Ambiente y Política Social, Eva Díaz Tezanos; el rector de la Universidad Politécnica de Madrid, Guillermo Cisneros, y la fiscal superior de Cantabria; Pilar Jiménez.

Pies de foto: distintos momentos del acto académico.