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"Si huele y se pudre, al contenedor marrón". Ésa es la normal general que desde el año 1993 aplican en la ciudad de Córdoba para fomentar entre los ciudadanos la necesidad de separar los residuos orgánicos domésticos. ¿Su destino? Hacer compost. Un camino en el que Cantabria ha comenzado a dar sus primeros pasos, con la progresiva implantación del contenedor marrón en los municipios de la comarca del Besaya donde la gestión de los residuos depende de la empresa pública MARE.

Precisamente para aprender, de forma práctica, a hacer compost y a utilizarlo correctamente, mañana martes, 26 de julio, las instalaciones del Centro Cultural San José-Fundación Quintana, en Suances, acogerán el taller 'Reutilización de residuos para hacer compost y su uso en huertos urbanos', que impartirán la responsable de comunicación de la empresa Sadeco (Saneamiento de Córdoba), Verónica López Solano, y el educador ambiental de 'El brote', también de Córdoba, Javier Poyato Cabrera. Un taller abierto al público, de acceso libre y gratuito, incluido en la programación cultural de los Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria que cuenta con el patrocinio de la Dirección General de Medio Ambiente de Cantabria.

El reciclaje de la denominada fracción resto es el último eslabón en el proceso de separación de los residuos domésticos, una vez que ya se ha popularizado el reciclaje del papel-cartón, los envases y el vidrio. "El objetivo final es llegar al residuo 0, y si no eliminarlos del todo sí al menos poder reducir los vertederos y que la economía lineal que llevamos ahora se convierta en una economía circular, de forma que no se consuman más materias primas de la naturaleza, y que todo tenga una segunda vida", explica Verónica López. Un objetivo "que no es tan difícil, solo es un hábito de vida que hay que adquirir", añade.

Labor de concienciación

En esta labor de concienciación de la población sobre la necesidad de separar en los domicilios los residuos orgánicos que, hasta ahora, iban al contenedor gris, la responsable de Comunicación de Sadeco tiene una amplia experiencia. "Desarrollamos tanto campañas a nivel educativo, con los jóvenes en los centros docentes, como a nivel ciudad, y es muy simple tener un cubo pequeño en la cocina a donde tirar a diario estos restos, y bajar a depositarlos en los contenedores marrones", asegura López.

Además, afirma que es "superfácil" hacer compost en casa, en pequeñas composteras, para poder utilizar después este abono natural en plantas y huertos urbanos. "Hay que tener claro, eso sí, que no es tierra sino abono que complementa a la tierra que enriquece el sustrato", matiza. "La idea es que sea un taller muy visual en el que participen los asistentes y que se vaya a casa sabiendo cómo con la materia orgánica que generamos en los domicilios se puede hacer compost", detalla Verónica López.

A modo de resumen, esta experta concluye que "lo principal es cuidar el medio ambiente y aprender a reciclar los residuos, a separarlos correctamente y también reducirlos, porque el mejor residuo es el que no se genera".

Pie de foto: Verónica López Solano.