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​El Consejo Social de la Universidad de Cantabria (UC) acaba de fallar el Premio a la Innovación Docente 2022 que ha recaído en las profesoras del departamento de Transportes y Tecnología de Proyectos y Procesos, Soledad Nogués Linares y Esther González González, con su proyecto "Aprendizaje participativo 3.0 aplicación de la metodología PBL según un enfoque de múltiples actores en materias de ordenación urbanística".

Dotado con 5.000 euros, el premio reconoce el esfuerzo individual y colectivo del profesorado de la UC en la generación y puesta en práctica de acciones innovadoras que supongan un claro avance en la adaptación de la enseñanza superior y de los procesos formativos a las necesidades del contexto actual. En el equipo colaborador de la asignatura participan también los profesores Milagros Canga Villegas y Rubén Cordera Piñera; así como la arquitecto y técnico de la Administración regional, Ángela Nogués Linares.

El jurado ha otorgado también un accésit, dotado de 2.000 euros, al proyecto dirigido por las profesoras Elisa Baraibar Díez y Mª Dolores Odriozola Zamanillo, del departamento de Administración de Empresas sobre el "Fomento de las competencias comunicativas en la enseñanza del emprendimiento".

Proyecto sobre situación real

El proyecto que ha obtenido el galardón consiste en la mejora de la metodología de aprendizaje basado en proyectos (Project Based Learning - PBL), ya instaurada en las asignaturas del área de Urbanística y Ordenación del Territorio del grado de Ingeniería Civil, utilizando un enfoque de múltiples actores e incorporando Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), destacando así el papel que el ingeniero civil puede jugar en la consecución de estos objetivos y en el servicio a la sociedad a través de la solución de casos reales.

En concreto, se plantea la inclusión de actividades de planificación urbana participativa, inclusiva y sostenible, que forman parte de las metas establecidas en ODS11 relativo a alcanzar ciudades y comunidades sostenibles. Este enfoque se aplica a la asignatura de Urbanismo y Servicios Urbanos de carácter obligatorio, en la que el alumnado lleva a cabo un proyecto que consiste en realizar el análisis urbanístico de un barrio de la ciudad que comprende un sector urbanizable, detectar sus posibles deficiencias y elaborar una propuesta de ordenación y urbanización del mismo, lo que permite mejorar la situación urbanística de la zona.

Las principales actividades nuevas planteadas en el proyecto docente han sido, en primer lugar, el aprendizaje de las diversas metodologías de planificación participativa existentes y de los conceptos de inclusividad y perspectiva de género mediante el uso de recursos online. Y, en segundo lugar, la propia ejecución de la participación realizada en las dos fases del proyecto urbanístico: primero, mediante una consulta a ciudadanos (asociaciones de vecinos) y colectivos vulnerables (ONCE) sobre la problemática urbanística de la zona a estudiar (fase de análisis), y posteriormente, mediante la consulta a expertos del mundo profesional sobre las alternativas de ordenación propuestas por el alumnado (fase de ordenación). Los comentarios y aportaciones recibidos de las sesiones de participación fueron incorporados por los alumnos en el proyecto de ordenación.

"Los alumnos se encuentran en una situación muy similar a un caso real, en donde todos los procesos urbanísticos deben conllevar la participación de todos los actores involucrados: las personas que viven en el barrio, los expertos de temas urbanísticos. Creo que para los alumnos ha sido muy interesante porque se han podido ver en una situación muy próxima a la realidad profesional con la que se van a encontrar más adelante", explica Soledad Nogués.

Los resultados de este proyecto docente se evaluaron mediante una serie de encuestas, realizadas tanto a los alumnos como a los participantes externos en ambas fases y al final de la asignatura, enfocados a la valoración de su grado de satisfacción y motivación con el proyecto, así como de la eficacia de las tareas propuestas y herramientas utilizadas.

"La principal innovación para estos estudiantes fue la conciencia de que cada vez que hacemos algo lo hacemos en un territorio, y en ese territorio viven personas de distintas tipologías. Por eso, incorporar a los colectivos vulnerables, con su visión sobre ciertos problemas les permite comprobar cuál es la problemática del que vive en el día a día de ese territorio", añade Esther González.

Premio de Innovación Docente

El Consejo Social de la Universidad de Cantabria, en su afán de impulsar la mejora continua de la calidad en el desarrollo de las distintas funciones universitarias, creó los premios de docencia, que vienen a añadirse a sus ya tradicionales premios de investigación.

Pueden presentar candidaturas el profesorado de la UC, individualmente o en grupo, o todo un departamento o centro cuando la índole de la propuesta así lo aconseje. 

Foto: Soledad Nogués (izquierda) y Esther González (derecha), ganadoras del Premio a la Innovación Docente 2022 del Consejo Social de la UC.