Abstract: Trabajos previos realizados unos 2 km al NO de la playa de Matalascañas (Almonte, Huelva) han revelado la existencia de varias decenas de pisadas humanas (Mayoral et al., 2021; Mayoral et al., 2022) y cientos de huellas de otros vertebrados del Pleistoceno (Neto de Carvalho et al., 2021). El afloramiento donde aparecen estas huellas se encuentra en la zona intermareal de la playa y está afectado por el oleaje. El descubrimiento coincidió con un periodo de temporales ocurrido durante el periodo de mareas muertas. Estas condiciones dieron lugar a la erosión la playa y al transporte de la arena intermareal hacia zonas más profundas. Sin embargo, temporales posteriores ocurridos durante un periodo de pleamares vivas equinocciales desmantelaron la base del acantilado que se encuentra por detrás del afloramiento, y aportaron arena que enterró de nuevo las huellas contribuyendo a su preservación. Este trabajo estudia la dinámica de la arena en diferentes situaciones de marea y oleaje identificando las condiciones que contribuyen a una mejor preservación del afloramiento patrimonial.

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