Pazos: “La huella más importante que dejó Juan Jordá fue su pasión por la universidad”
Familiares, amigos y compañeros recuerdan al rector Jordá, fallecido en 2002, en un acto en la UC
Juan Jordá, rector de la Universidad de Cantabria en 2001-2002, ha sido recordado esta mañana en el 15º aniversario de su fallecimiento. Ángel Pazos, quien fue alumno, compañero de departamento y amigo del homenajeado, ha inaugurado el acto, desarrollado en formato de jornada técnica, en el Aula Magna de la Facultad de Ciencias y organizado por el Vicerrectorado de Investigación y Transferencia.
El actual rector de la Universidad de Cantabria ha destacado el excepcional carácter de Jordá, no sólo en la gestión, sino también en la docencia y también en la investigación. En este sentido, Pazos, ha destacado como la huella más importante dejada en la UC por el que fuera catedrático de Fisiología Humana "su pasión por la universidad y, sobre todo, su pasión por lo que tenía que ser la gestión del modelo universitario".
"Demostró que tenía un proyecto de lo que tenía que ser la UC"
Pazos ha señalado que "en todos esos puestos que desarrolló, demostró que tenía un proyecto, una idea de lo que tenía que ser la Universidad de Cantabria y eso quedó plasmado en muchas decisiones aunque luego, en su etapa de rector, el poco tiempo no le permitió casi desarrollar las muchas ideas que tenía".
Federico Gutiérrez-Solana, rector de la UC entre 2002 y 2012 y actualmente director del Centro Internacional Santander Emprendimiento (CISE), ha recordado también que "hablar de Juan Jordá es hablar de una amigo fundamentalmente, de una gran persona y de todo el aprendizaje que representó para muchos convivir con él y trabajar en equipo; el sentirte siempre bajo principios de confianza y que te apoyara en todas las iniciativas que se podían plantear legando su responsabilidad a la tuya. Era una persona sin acritud hacia nadie, siempre tratando de unir y, desde luego, una parte de la historia fundamental de esta universidad está vinculada a ese espíritu."
"Una parte de la historia fundamental de esta universidad está vinculada a su espíritu"
Entre los asistentes al homenaje se encontraba también Jaime Vinuesa, predecesor en el cargo de rector (1992-2001) y quien tuvo en su equipo como vicerrector a Juan Jordá. Vinuesa ha destacado la vinculación que tenía con la Facultad de Ciencias, pese a no ser su centro de origen: "Sigues estando en casa", ha señalado, al tiempo que aseguraba que fue Jordá, primero como vicerrector y luego como rector, quien se encargó de las conversaciones con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para lograr crear el Instituto de Física de Cantabria (IFCA). "Juan tuvo un gran protagonismo en su creación", ha indicado.
Foto: El vicerrector de Investigación y Transferencia, Javier León; el rector de la UC, Ángel Pazos y Emilio Sánchez-Barceló, catedrático de la UC.
Familiares, amigos y compañeros en la universidad han asistido al, como es el caso Emilio Sánchez-Barceló, catedrático de Fisiología Humana, quien compartió con Jordá años de universidad, como estudiantes, y de vida académica, ya en la Universidad de Cantabria. "Fue una persona tremendamente inteligente, especialmente dotada para los temas de gestión, y también para la investigación, aunque por motivos de su dedicación a la gestión, tengo menos oportunidades para demostrarlo", ha destacado Sánchez-Barceló, quien, en el marco de jornada ha intervenido con la ponencia "Hicimos la luz… y perdimos la noche".
Junto a Sánchez-Barceló, también han intervenido el catedrático de Óptica, Fernando Moreno, y Xavier Barcons, profesor de investigación del Instituto de Física (IFCA) y próximo director del European Southern Observatory.
Juan Jordá, licenciado en Medicina y Cirugía y doctor por la Universidad Complutense de Madrid, se trasladó en 1974 a la Universidad de Cantabria como profesor agregado interino. Obtuvo la cátedra en Fisiología Humana en 1984.
Desde su incorporación al campus de Cantabria desempeñó diversos cargos académicos, entre ellos vicedecano de la Facultad de Medicina (1977-79), decano (1979-82), vicerrector de Investigación (1984-86), director de la Escuela Universitaria de Enfermería (1988-92), vicerrector de Investigación (1992-2001).
El 1 de marzo de 2001 fue elegido rector de la Universidad de Cantabria, falleciendo apenas un año después víctima de enfermedad.
