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El origen del universo, su evolución y su destino, desde la perspectiva de la física y la filosofía, de la mano de dos figuras excepcionales como el filósofo Xavier Zubiri y el físico teórico Roger Penrose, ha sido el tema central del monográfico "Cosmología. De la "Estructura dinámica de la realidad" de Zubiri a "El camino a la realidad" de Penrose', que hoy finaliza en Laredo, dentro de las actividades  formativas de los Cursos de Verano de la Universidad de Cantabria. El académico de Número la Real Academia Nacional de Medicina de España, catedrático de Física e ingeniero de Caminos, Francisco González de Posada, ha dirigido este curso en el que se han aventurado a hablar del destino del universo. "A pesar de que la física sabe que no podemos saber cómo es el Universo hoy, somos tan atrevidos que explicamos toda la historia desde el Big Bang hasta el hipotético futuro que ocurrirá dentro de muchos miles de años".

Posada señala que el universo "surge, evoluciona y por lo que sabemos, debe morir algún día". No obstante, subraya que aún no hay una fecha para este final. "Sabemos cuándo fue el primer día, hace unos 13.800 millones de años; creemos saber que el planeta Tierra, el sistema solar en general, tienen unos 4.800 millones de años, es decir, la tercera parte del universo, y le queda al sol, funcionar como estrella, otros 4.800 millones de años, pero desaparecemos, como especie, mucho antes".

Y para el catedrático, esta desaparición irremediable puede adelantarse a criterios científicos-biológicos por factores como un holocausto nuclear, el choque de un asteroide o el cambio climático. "Bombas nucleares y similares tendrían que desaparecer todas. Centrales nucleares, cuanto antes las quitemos todas, tanto mejor; cambio climático, cuando los políticos con mayor responsabilidad en los principales países, en vez de enfrentarse a la tesis final de Obama, quiten de circulación las tesis de Trump, iremos por buen camino y frente a los posibles objetos cósmicos externos no tenemos ningún conocimiento actual".

Como alternativa al desastre, Posada recuerda que desde el siglo pasado "ya veníamos pretendiendo, de manera demasiado optimista, entablar relaciones con unas hipotéticas civilizaciones en otros planetas de otras estrellas porque ya sabemos que en nuestro sistema solar no es posible. Es una actitud pretenciosa desde la hipótesis de que existieran y a finales del año 90 del siglo pasado, la actitud fue otra: vamos a ver si encontramos planetas en los que sea posible que haya surgido la vida, se haya desarrollado y haya alcanzado un nivel similar al del ser humano, más o menos".

Bajo esta premisa, en 1995, "descubrimos el primer planeta extrasolar pero no estaba en la ecoesfera de su estrella y no tenía ninguna de las características necesarias para que surja la vida, y parecía que la búsqueda iba a ser muy lenta. Y ahora ya no sé, he perdido la cuenta, pero ya tenemos 2.500 planetas extrasolares y algunos ya están en la zona de su estrella, con lo que es posible que surja la vida, con condiciones bastante similares a las de la Tierra".

Ahora, los científicos estudian la atmósfera de esos planetas para comprobar si hay elementos que indiquen que exista o haya existido la vida "y en esa tesitura estamos.  Pero en principio no hay ninguna duda de que en algún sitio habrá vida", sentencia.

Pie de foto: Francisco González de Posada, en Laredo.