Su grupo estudia la biología molecular de la patogenicidad de la bacteria Brucella, causante de una importante zoonosis que afecta al ganado vacuno y a otros animales domésticos y salvajes, pero que también se trasmite al hombre.
La capacidad de Brucella para producir infecciones se debe sobre todo a que la bacteria es capaz de crecer en el interior de algunas células de la persona que infecta. En su investigación emplea herramientas de Biología Molecular y Microbiología y recientemente genómica comparativa, análisis transcriptómico y secuenciación masiva para comprender los detalles de los mecanismos que permiten a Brucella sobrevivir en las células de su huésped y producir enfermedad. El objetivo es buscar soluciones para el tratamiento y la prevención de la brucelosis y herramientas epidemiológicas para estudiar el origen y las vías de trasmisión de brotes epidémicos.