Abstract: En el envejecimiento cerebral ocurren una serie de cambios que conllevan la disminución de los procesos
de adaptación y respuesta. Estas transformaciones pueden finalizar en el padecimiento de deterioro
cognitivo y/o demencia. Aunque el origen de estas modificaciones es diverso, la inflamación y el estrés
oxidativo explican parte de los mecanismos fisiopatológicos de dichas anomalías del funcionamiento
cerebral. La neuroinflamación desencadena daño a nivel neuronal mediante la presencia de citocinas
inflamatorias y la activación de la microglía, a través de receptores de membrana y factores de activación
nuclear. Este fenómeno neuroinflamatorio también afecta la plasticidad neuronal, alterando la génesis y el
mantenimiento de la potenciación a largo plazo ocasionando deterioro en la memoria dependiente del
hipocampo. El estrés oxidativo y a la producción de radicales libres de oxígeno, también originan efectos
tóxicos en los cerebros envejecidos, en gran parte debido a la peroxidación lipídica y daños en el ADN. La
identificación de los mecanismos moleculares implicados en la patogénesis de estos sucesos puede arrojar
nueva luz sobre posibles dianas terapéuticas y ofrecer estrategias para la prevención de las patologías
relacionadas con el envejecimiento cerebral, el deterioro cognitivo y la demencia.