Abstract: RESUMEN. Cuando la familia estaba organizada con referencia a la familia nuclear y legítima, una familia fundada en el matrimonio con una fuerte división de los roles del hombre y de la mujer, las nociones de padre y madre, parecían ser suficientes. Se creó así una imagen de la familia ?natural? como aquella en la que la pareja conyugal, la progenitora y la parental eran una misma realidad, dando origen a un modelo de
parentesco centrado en la sexualidad/procreación y a un tipo de familia, nuclear, monógama y heterosexual. Sin embargo, los cambios en el estatuto de las mujeres, la potenciación de la voluntad individual o la evolución de la legislación y de las tecnologías, traen como consecuencia una desestabilización del modelo genealógico tradicional, lo cual nos lleva a constatar un diverso comportamiento de las personas
respecto de la maternidad y paternidad cada vez más ligadas a una decisión voluntaria de asumir tal responsabilidad. La consecuencia es un derecho de filiación autónomo, que ha consagrado un nuevo campo a favor de la autonomía de la voluntad sobre la base de la estructuración del compromiso parental y no sobre la estructuración del modelo familiar.